Carmelo García Ramos, 17 años sin ti

Carmelo desapareció el 9 de abril del año 2005. Vivía con sus padres. Les comentó que se marchaba junto a un par de amigos a pasar unos días a la playa de Las Arenas, situada entre La Aldea de San Nicolás y Artenara. Era algo que solía hacer de vez en cuando, así que a la familia no le pareció extraño. Sin embargo, fueron pasando las semanas y Carmelo no volvía. Alarmada, su hermana Rosa decidió acudir a la Guardia Civil para que le ayudasen a buscar a Carmelo. Fue como predicar en el desierto, la benemérita hizo caso omiso de su petición y le respondieron que lo buscara ella misma. Carmelo era un hombre con adicciones, y consideraron que estaría inmerso en ellas perdido en la playa. 

Rosa, con el corazón en un puño, se fue caminando hasta la playa de Las Arenas. Un camino de un par de horas nada fácil. Sólo se puede llegar hasta allí caminando o navegando. Se dirigió al lugar donde solía estar su hermano, y allí encontró a los dos amigos. Se mostraron tremendamente sorprendidos cuando Rosa les explicó que Carmelo no había vuelto a la casa. “La última vez que lo vimos estaba cogiendo lapas, después no supimos más de él y pensamos que había vuelto a casa de sus padres”- le respondió uno de ellos.

Aquellas palabras hicieron que Rosa temesiese lo peor. Visitó la cueva donde normalmente se quedaban a dormir los tres, allí encontró las llaves y la cartera de su hermano. Curiosamente, unos días antes había aparecido la mochila de Carmelo en la azotea de la casa donde residía. En ese momento, Rosa apretó contra su pecho las cosas de Carmelo. Estaba segura de que aquellos dos supuestos amigos le habían hecho algo y nunca más podría volver a abrazar a su querido hermano.

Se denunció nuevamente a la Guardia Civil, y ya sí, menos mal, se pusieron manos a la obra. Le buscaron por tierra y mar, pero no hallaron absolutamente nada. Se interrogó a los dos amigos, los agentes también sospechaban de ellos, sin embargo no consiguieron que dijeran qué habían hecho con Carmelo.

Durante todos estos años, no se ha vuelto a tener ni una sola pista sobre la desaparición del hombre. Los amigos que estuvieron con él han muerto, con lo cual, las probabilidades de conocer la verdad se reducen bastante. Rosa sigue incansable buscando a Carmelo. En un principio, llamaba asiduamente a la Guardia Civil para interesarse por la investigación, pero dejó de hacerlo cuando un agente le dijo que no molestase más. Que ya la llamarían ellos si había novedades. Un comportamiento repulsivo por parte de la Guardia Civil. A los familiares de los desaparecidos hay que tratarlos con tacto, cierto afecto y entender su nerviosismo. No me parece que sea pedir demasiado a las fuerzas de seguridad del Estado.

El caso de Carmelo sigue abierto. Rosa no cesa en su búsqueda a pesar de los años y cansancio. El padre murió, pero la madre de Carmelo y Rosa, con 90 años sigue esperando que un día su hijo aparezca por la puerta y le dé uno de aquellos besos que tanto le gustaban. Era su pequeño.

Triun Arts habla con Rosa, la hermana de Carmelo García Ramos

Rosa es una mujer rota. Fuerte, también valiente, pero está hecha pedazos. Ha buscado a su hermano sin descanso, no piensa dejar de hacerlo. Triun Arts habló con ella con la sensibilidad que le caracteriza. Si pudiera, traspasaría la pantalla para dar un abrazo a todos los que se emocionan hablando de su familiar a pesar de los años que hayan pasado. Aquí os dejo la entrevista.